Erupción dentaria
¿Sabíais que la formación de los dientes comienza antes del nacimiento del bebé? pues sí, desde la 5ª-6ª semana de embarazo. Primero se forman los dientes temporales o «de leche» y poco antes del parto comienzan a desarrollarse los definitivos. ¿No es increíble?
La erupción dentaria es un proceso prolongado en el tiempo, que va desde que comienza a formarse el diente hasta que ocupa su lugar.
Dientes temporales
Se llama dientes de leche porque son más blancos y porque comienzan a emerger a la edad en que el bebé se alimenta con leche.
Los primeros dientes suelen salir entre los 6 y los 12 meses y, casi siempre, son los centrales inferiores (incisivos). La aparición de los primeros dientes es muy flexible pero debemos consultar si no han aparecido a los 18 meses.
Estos dientes se caerán durante la infancia, siendo sustituidos por los permanentes.
Dientes permanentes:
Los primeros dientes permanentes salen entre los 6 y los 8 años. En total serán 32 piezas: 8 incisivos, 4 caninos, 8 premolares y 12 molares. Algo muy curioso es que las muelas del juicio erupcionan después de la infancia, aunque en muchas ocasiones no erupcionan hasta la etapa adulta.
¿Qué hacer si tiene dolor con la salida de los dientes?
Cuando salen los dientes puede producir molestias:
Ofrécele objetos que pueda morder sin peligro (mordedores, incluso hay algunos preparados para enfriarlos previamente). No están recomendados los mordedores vibratorios.
Los fármacos que alivian el dolor, también llamados analgésicos (paracetamol), se pueden administrar si la molestia es mayor, a dosis adecuada para su edad y peso.
No uses cremas o geles con anestésicos para frotar en las encías porque pueden ser tóxicos.
Sabías que…
La erupción dentaria no produce fiebre (es decir más de 38°C), únicamente puede producirse algún pico de febrícula aislado.
Es recomendable que antes de los dos años desaparezcan hábitos como chuparse el dedo y el uso de chupete ya que pueden producirse alteraciones en la dentición.
Higiene bucodental
La prevención de caries es tan importante que cobra sentido desde antes incluso del nacimiento. La madre gestante debe tener una buena higiene bucodental para que ninguna bacteria pase a formar parte de la flora de la boca del futuro bebé.
Ya cuando nacen contamos con dos pilares básicos:
La higiene dental:
Se recomienda la limpieza de las encías desde el nacimiento, una vez al día, con una gasa o paño húmedo.
Desde la erupción del primer diente de leche se debe limpiar con pasta dental de 1000 partes por millón de flúor. Lo recomendable es mínimo, dos veces al día, una de ellas siempre por la noche. La cantidad será el equivalente a una lenteja.
Entre los 3 y 6 años la cantidad de pasta será equivalente a un guisante, manteniendo el mismo tipo de pasta. Es importante recordar que el cepillado debe ser supervisado por un adulto y no debemos permitir que los niños chupen o se coman la pasta dental.
A partir de los 6 años de edad la pasta dental debe ser de 1450 partes por millón de flúor, manteniendo la misma cantidad, pero aumentando el número de veces a tres al día.
Hábitos de alimentación:
El esmalte del diente es permeable al ácido de los alimentos por lo que se debe retrasar lo más posible, la introducción de alimentos dulces, sobre todo los refinados como: galletas, bollos, zumos, refrescos, chucherías, etc.
- Evitar consumir estos alimentos entre horas.
- Evitar aquellos alimentos con una consistencia muy pegajosa.
- Nunca endulzar el chupete con líquidos azucarados o azúcar.
- Fuera de las comidas la bebida debe ser solo agua.
A pesar de estas medidas, a veces se producen caries, siendo importante detectarlas en su fase inicial. Debemos vigilar si aparecen manchas blancas, lineales, como tiza, en la zona próxima a las encías y seguir las revisiones del programa de salud bucodental escolar.